Desde hace varias semanas el Ministerio de Hacienda viene adoptando medidas para mitigar el impacto de los problemas de caja que enfrenta el Gobierno para que proteger por un lado la regla fiscal y por el otro, para ponerse en sintonía con la caída en el recaudo tributario que ha reportado la Dian durante el primer semestre, entre otras cosas, por culpa de la desaceleraciòn económica.
La que sin duda fue la medida más importante, es el recorte del gasto en $20 billones mayoritariamente de funcionamiento, que se anunció a finales de junio, y donde se dejó claro que si llegase a ser necesario, las autoridades financieras no descartan apretarse un poco más el cinturón si el panorama no mejora en los próximos meses.
Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda y Crédito Público
Si bien esta medida fue celebrada tanto por centros de análisis, como por los gremios y los diferentes sectores políticos y sociales, en su momento se dejó la advertencia de que los problemas de caja no serían fáciles de resolver y que al país le esperaba un detenido seguimiento a las cuentas nacionales para evitar escenarios de incertidumbre que sigan golpeando la confianza de los inversionistas.
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Haciendo seguimiento a un tema que ellos mismos pusieron sobre la mesa, el equipo de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá volvió a poner sus ojos en los saldos de depósitos del Tesoro Nacional en el Banco de la República y encontró que las cuentas siguen apretadas y que si bien hubo un alivio por el recorte, el flujo de recursos no está mejorando como se necesita.
Ministerio de Hacienda y Crédito Público
De acuerdo con estos analistas, el dinero en las cuentas del Estado “siguió registrando nuevos mínimos históricos. Al 5 de julio el saldo cayó a un mínimo de $7,8 billones, muy por debajo de un año atrás, cuando registraba $36,6 billones, con lo que los problemas de caja persisten”, prendiendo así una nueva alerta en el tema.
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Esta situación para ellos se complica si se tiene en cuenta que “este mes se debe realizar el pago del vencimiento del TES tasa fija del 24 de julio del 2024 por $7,9 billones de principal más $0,8 billones de intereses”, con lo cual advierten que la “Nación tiene poco margen de maniobra ante posibles eventualidades”.
Pesos colombianos
Dicho de una forma más sencilla, en este momento en las cuentas del Estado hay únicamente la plata suficiente para pagar las deudas que tiene el país, mientras que temas como el gasto de funcionamiento o la posibilidad de que existan recursos que se puedan usar eventualmente para inversión, quedaron en el aire.
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Con esto sobre la mesa, para el rector de la Universidad EIA y exministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, queda claro que todavía se está gastando de más e hizo el llamado para que el Ministerio de Hacienda comprenda que está ante un escenario de austeridad que exige medidas urgentes, además de las ya implementadas, o de lo contrario se desataría una crisis en la economía.
“Muy preocupante la realidad de caja de la Nación. Es urgente congelar por lo menos $30 billones adicionales y reducir el nivel de gasto primario que hoy es en relación al PIB casi el de un año de pandemia (sin necesidad). Existe derroche en el Presupuesto Nacional y se necesita más austeridad. También urge crecer más con un buen plan de reactivación, para que el recaudo incremente”, explicó este experto.
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Si se tienen en cuenta los datos suministrados por el Banco de Bogotá en lo concerniente al saldo del Estado en sus cuentas oficiales, se puede decir que en julio se mantuvo la tendencia que también se denunció un mes antes, frente a que la caída de estos recursos supera el 70% (76% junio y 80% julio), demostrando que todavía hace falta plata para ejecutar los planes del gobierno Petro.
José Manuel Restrepo, rector de la Universidad EIA
Otro dato abordado por estos expertos fue el déficit del Gobierno Nacional Central, punto en el que reportaron que entre enero y abril fue de -2,4% del PIB, “el más elevado desde el 2006 y explicando la política de recortar el gasto. De hecho, el sustento se encuentra en que el balance primario fue de -1% del PIB, cuando el exigido por la Regla Fiscal es de -0.9%”, según manifestaron.
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Dicho esto, se sumaron a las voces de quienes señalan que cortar $20 billones en el gasto de este año no es suficiente, y en su caso manifestaron que hay que avanzar en la adopción de nuevas medidas, llegando incluso a pedir que la reducción sea del doble a lo que ya se planteó o de lo contrario no se podrá cumplir las metas.
Economía
“En ese sentido, el compromiso de recortar el gasto en $50,8 billones obedeció a que en abril ya el Gobierno estaba incumpliendo la Regla Fiscal y se requería de un gran esfuerzo para dar revés a la situación. La publicación confirma que, desde ahora, los reflectores pasarán de estar puestos únicamente en el cumplimiento de la meta de recaudo tributario y ahora los datos de ejecución presupuestal tendrán un mayor peso”, explicaron.
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Otra de las apuestas en las que también trabaja el Ministerio de Hacienda para superar esta crisis de caja es el aumento del cupo de endeudamiento en US$17.600 millones que se solicitó al Congreso de la República, que ya logró un primer aval y se alista para enfrentar su debate en plenarias conjuntas de Senado y Cámara, puesto que viene con mensaje de urgencia desde la Casa de Nariño.
Economía colombiana
Respecto a cómo se usarán exactamente los US$17.000 millones que están solicitando como aplicación de cupo al Congreso, desde el Ministerio de Hacienda explicaron que US$5.500 se usarían en 2024, mientras que en 2025 se subiría a US$8.800 millones y en 2026, con corte a agosto, la proyección apunta a US$4.038 millones.
