Desde ropa vintage hasta fotografías del siglo pasado.
información Valle.
En medio de los cañaverales de la región, se encuentra un tesoro cultural que brinda servicios a una población vulnerable, históricamente marginada por el sistema educativo central; La cabaña Chuchú, ubicada en el pintoresco municipio de Santa Helena, es un oasis de creatividad y tradición.
Chuchú, nombre real Walter Belalcázar, es el corazón y el alma de este espacio único.
De estatura media y cabello rizado, Chuchú te invita a sumergirte en un mundo donde la distancia sólo enriquece las ideas.
Para él, Santa Elena es más que un punto en el mapa; Es un lugar donde las historias cobran vida y el arte se convierte en un puente hacia el pasado.
Este personaje emblemático, embajador del buen arte y de la autenticidad, ha hecho de su casa museo un testimonio vivo del pasado.
Cada elemento cuenta una historia, cada rincón respira nostalgia y autenticidad. Desde ropa antigua hasta fotografías del siglo pasado, La Choza de Chuchú ofrece una experiencia única para quienes buscan conectarse con la historia y la cultura local.
Una de las razones imperdibles para visitar La Choza de Chuchú es la oportunidad de posar frente al lente de Chuchú y llevarte recuerdos inolvidables.
Sus fotografías, en un estilo sepia que evoca el encanto del Viejo Oeste, te transportarán a otra época en un abrir y cerrar de ojos. Como dice el refrán, una imagen vale más que mil palabras, y en este caso cada fotografía es un viaje en el tiempo.
¿Cómo llegar a La Choza de Chuchu?
Si te preguntas cómo acceder a este tesoro cultural, es sencillo.
Una vez en Santa Helena solo debes dirigirte al parque central y tomar el camino antiguo hacia El Cerrito, a solo un kilómetro, a la izquierda del camino encontrarás La Choza de Chuchú.
También puedes optar por una corta caminata de 15 minutos desde el parque hasta la casa museo, disfrutando del encanto campestre del sendero.
Si tienes alguna duda sobre cómo llegar, no dudes en preguntar a los amables lugareños, quienes podrán guiarte hasta este tesoro escondido de Santa Helena.
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