Redacción BL
El 2020 ha sido un año que ha abierto el debate sobre la figura de Novak Djokovic como líder del tenis, del deporte y de la vida en general.
El domingo, mientras disputaba su partido de octavos de final del US Open contra el español Pablo Carreño, fue descalificado por un pelotazo a una juez de línea, una nueva polémica que se les suma a la realización de su torneo en Belgrado, Serbia), en el que él, su familia y otros jugadores y técnicos terminaron infectados con coronavirus, y al sindicato de jugadores que le formó a la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), en medio de un torneo organizado por este ente.
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Pelotazo al cuello
Lo primero que hay que decir es que es justo y se aplicó bien el reglamento. Esto rige igual para el número uno o el escalafonado mil. No se mide la intención, sino la acción. La cabeza le jugó mal a Djokovic.
Frustrado después de perder su servicio contra Carreño, lo que le daba ventaja 6-5 al español en el primer set, el serbio sacó una pelota del bolsillo y la lanzó hacia la pared, golpeando en el cuello a una juez de línea que cayó al suelo dando un grito de dolor. Se ve que no quiere golpearla, pero lo hace.
Al ver que la había impactado, Djokovic pidió rápidamente disculpas y corrió a ver el estado de la juez, que debió recibir atención médica sobre la pista Arthur Ashe, la principal de Flushing Meadows.
Djokovic conversó con los oficiales del juego durante varios minutos, en los que les pidió que le aplicaran algún tipo de sanción diferente a la descalificación, pero finalmente los oficiales aplicaron el reglamento y Carreño avanzó a los cuartos de final del grand slam de Nueva York. La regla del tenis en este tipo de acciones es inflexible y clara: si se golpea a alguien con la bola fuera del mismo juego, conlleva la descalificación.
En la historia ya ha sucedido. En el 2017, el canadiense Denis Shapovalov, enfadado por el resultado, lanzó un pelotazo que, sin intención, golpeó al juez de silla Arnaud Gabas, y el tenista fue descalificado de la serie de Copa Davis contra Gran Bretaña.
Este es un hecho sin precedente porque es la primera vez que en un grand slam el primer cabeza de serie es descalificado
Otro tenista temperamental, André Agassi, fue descalificado en Indianápolis en 1996 por lanzar una pelota al público, lo que le provocó una advertencia, que luego completó insultando al juez de silla y al juez de línea antes de ser castigado con la derrota.
Este es un hecho sin precedente porque es la primera vez que en un grand slam el primer cabeza de serie es descalificado. En 1990, el estadounidense John McEnroe, entonces número 4 del mundo, fue descalificado del Abierto de Australia por recibir tres faltas de conducta en el partido contra el sueco Mikael Pernfors.
Las otras perlas
Djokovic acabó de la peor forma su racha de 26 victorias seguidas en este 2020, año en el que ha ganado los títulos del Abierto de Australia, Masters 1.000 de Cincinnati y el ATP 500 de Dubái.
A este año polémico se le suma el torneo que hizo en Belgrado, con pocos protocolos, tribunas llenas y en el que hubo hasta fiesta. El resultado: Djokovic; su esposa, Jelena; su preparador físico, Marko Paniki, los tenistas Grigor Dimitrov, Borna Coric y Viktor Troicki, entre otros, dieron positivo por la covid-19.
Además de la creación de la Asociación de Jugadores de Tenis Profesionales, un sindicato de tenistas, que se hizo en medio de un torneo ATP, sin una idea clara de a qué le apuntarán y que busca una división de poderes entre jugadores y organización de torneos. Roger Federer y Rafael Nadal lo rechazaron.
Djokovic, un excelente deportista y de los mejores tenistas de la historia, opaca su imagen con acciones polémicas por fuera de lo deportivo, que abren el debate sobre su imagen como líder del tenis.
Felipe Villamiza M.
Redactor de EL TIEMPO
En Twitter: @FelipeVilla4
