Mogadiscio, Somalia – El gobierno somalí ha solicitado formalmente a las Naciones Unidas que ponga fin a su misión política en Somalia (UNSOM) antes del 31 de octubre, fecha en la que expirará el mandato actual.
Esta solicitud fue articulada en una carta del Ministro de Relaciones Exteriores somalí, Ahmed Moalim Fiqi, al Consejo de Seguridad de la ONU y al Secretario General Antonio Guterres, enfatizando el cambio de Somalia hacia prioridades de desarrollo a largo plazo en medio de los actuales desafíos de seguridad.
La UNSOM ha sido fundamental para ayudar en los esfuerzos de paz y reconciliación, ofreciendo asesoramiento sobre políticas estratégicas y promoviendo los derechos humanos y la igualdad de género en colaboración con las fuerzas de paz de la Unión Africana.
Si bien reconoció las importantes contribuciones de la misión a la estabilidad de la nación, Fiqi expresó la disposición de Somalia a realizar la transición del mandato político de la UNSOM a un equipo de la ONU en el país dedicado a abordar cuestiones de desarrollo.
Este plan de transición llega en un momento crítico en el que Somalia enfrenta mayores amenazas del grupo extremista vinculado a Al Qaeda, Al Shabab, que ha intensificado sus ataques en todo el país.
La decisión del gobierno somalí subraya un giro estratégico hacia la mejora de su marco de desarrollo y aparato de seguridad en cooperación con socios internacionales.
Recientemente, Estados Unidos reveló planes para establecer hasta cinco bases militares para reforzar las capacidades del ejército somalí contra tales amenazas.
Además, la Brigada Danab, una unidad de respuesta rápida formada en virtud de un acuerdo entre Estados Unidos y Somalia en 2017, ha sido fundamental para contrarrestar las operaciones de al-Shabab.
La medida para poner fin al mandato de la UNSOM se considera un paso significativo en el enfoque asertivo de Somalia para asumir un mayor control de su agenda de seguridad y desarrollo nacional.
La propuesta del gobierno somalí destaca su compromiso con una nueva fase de asociación con las Naciones Unidas, centrándose más en el desarrollo sostenible mientras continúa combatiendo la persistente amenaza del terrorismo.
