Ya han pasado tres años desde que la iglesia de Buenaventura denunció la existencia de ‘casas de pique’. En aquel entonces, el número de muertes violentas en esa ciudad era de más de 84 víctimas por cada 100 mil habitantes.
Muchas de esas muertes eran tragedias atroces en aquellas casas, provocadas por las bandas de la ‘Empresa’, ‘El Clan del Golfo’ y el Frente 30 de las Farc, que se disputaban el poder en la zona y también las llamadas rutas de salida de cargamentos de estupefacientes, generando aguda inseguridad en el Pacífico del Valle del Cauca.
Esto llevó a la toma de la población por el Ejercito, Armada y Policía, que enfrentaron a los llamados jefes de las bandas delictivas y capturaron a sus cabecillas en Cali y en Buenaventura.
36 meses después de la toma, los niveles de homicidios siguen cayendo. En el último año la reducción fue del 29%.
Hoy en día, según el coronel Camilo Álvarez, comandante de la Policía Metropolitana de Cali, «el número de muertes violentas en Buenaventura es de 15 por cada cien mil pobladores, es decir, la mitad de los registros del país».
«Las cifras son positivas, pero deben seguir cayendo», añadió el comandante, quien dijo que afinarán los operativos para reducir otros delitos, como el robo de motos y vehículos, y la extorsión en la ciudad portuaria mas importante del país.
Fuente: Caracol Radio
