Buenos Aires vuelve a darle la espalda a Messi
Ante Bolivia, la selección albiceleste volverá a jugar en un estadio con sólo el 50% de su capacidad completo. Mientras el mundo entero se enloquece por verlo en cada una de sus giras, los argentinos no lo disfrutan en su país
Tras la decepción que marcó la eliminación del Mundial de Sudáfrica 2010 y la desilusión en la Copa América organizada en Argentina, el entusiasmo y la confianza de los hinchas para con su selección cayó a niveles sin precedentes. Ni siquiera Messi, quien con su sola presencia obliga a poner en España y en otros lugares con escasa cultura futbolística el cartel de "tickets agotados", despierta en sus compatriotas las ganas de ir al estadio.
Tampoco la baja de precios en las entradas, ni la convocatoria de jugadores de renombre, como Gonzalo Higuaín o Sergio Agüero, que han marcado goles en sus últimas presentaciones con la Albiceleste, parecen suficientes para que el estadio Monumental de Buenos Aires aparezca lleno el viernes por la tarde, para colmo, en medio de plena jornada laboral.
El horario del partido (17:00, hora local), más el poco entusiasmo que genera la selección, atentan contra una mejor concurrencia y, según estimaciones de la prensa local, los dirigidos por Alejandro Sabella recibirán el aliento de unas 30 mil personas, algo menos que las 32 mil presentes en el inicio de la Eliminatoria con victoria 4-1 sobre Chile en el mismo escenario.
Lo más sorprendente de la pobre convocatoria gira en torno a la marca Messi, que vinculada al fútbol ha sido la más rentable a nivel mundial pero que paradójicamente no logra ser profeta en su tierra. La última vez que el estadio de River Plate se vio colmado fue en el amistoso postmundial frente a la última campeona del mundo,España, donde los argentinos mostraron más admiración por los destellos de Andrés Iniesta, Cesc Fábregas o David Villa que por la contundente goleada 4-1 de su equipo.
Desde la era Maradona, pasando por Sergio Batista, finalizando en Sabella y con Lionel Messi como atracción principal en cancha, la selección argentina llenó estadios en Moscú, Madrid, Múnich, Quito, La Paz, Asunción, Montevideo, Saitama, Doha, Ginebra, New Jersey, San José de Costa Rica, Calcuta, Dacca y Puerto La Cruz, pero en sus últimas tres presentaciones en Buenos Aires nunca superó el 60% de la capacidad.
Durante la reciente Copa América, que ganó Uruguay con un lleno total en la final con Paraguay, Argentina jugó hasta cuartos de final en Córdoba, Santa Fe y La Plata ante estadios repletos. Pero parece que el amor con los hinchas en Buenos Aires no tendrá una pronta reconciliación, por lo que la AFA estudia la posibilidad de mudarse al interior del país en 2012 para generar un mayor entusiasmo.
