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Tras confirmarse la ausencia de Japón, el país centroamericano contestó afirmativamente a la invitación de la Conmebol. Los costarricenses presentarán una selección Sub 22 reforzada con cinco jugadores de mayor jerarquía
Costa Rica confirmó su presencia en la Copa América 2011 en reemplazo de Japón a través de una nota oficial remitida a la Conmebol. Integrará el grupo A con la Argentina, Bolivia y Colombia. La Federación de ese país centroamericano, presidida por Eduardo Li, ratificó que asistirá con un equipo olímpico reforzado.
La invitación a Costa Rica se formalizó por parte de la Confederación Sudamericana de Fútbol, que en su nota requirió "una pronta respuesta de confirmación", debido al "escaso tiempo" de que se dispone y "a efectos de coordinar con la Asociación de Fútbol Argentino toda la infraestructura necesaria".
"Teniendo en cuenta que su selección siempre fue una alternativa que valoramos, le hacemos llegar la invitación formal para ocupar el lugar de Japón en el programa de partidos que acompañamos", indicó la nota oficial de la Conmebol. Completó: "Estamos seguros de que su participación será muy valorada por los aficionados y dará brillo a esta competencia deportiva, que es la más importante de nuestra Confederación".
Inmediatamente se conoció la respuesta de Li desde Costa Rica y se informó que los dirigentes, el cuerpo técnico y los futbolistas ya empezaron a pensar en esa competencia, que será inmediata a la Copa de Oro de la Concacaf, prevista para junio en los Estados Unidos.
El entrenador de los Ticos, Ricardo Lavolpe, tendría en sus planes citar a algunos jugadores que militan en el extranjero, entre quienes se destacan el atacante Bryan Ruiz, el principal referente del fútbol costarricense en Europa.
Costa Rica ya participó de la Copa América en las ediciones Bolivia 1997, Colombia 2001 y Perú 2004, por lo que jugará por cuarta vez en el torneo continental más antiguo del mundo.
Los japoneses, invitados junto a México al torneo de selecciones más antiguo del mundo, se vieron obligados a renunciar por el retraso que sufrió la liga nipona a raíz del devastador sismo, tsunami y desastre nuclear que azotaron el país en marzo pasado.
Infobae
