COPENHAGUE, Dinamarca (AP) — La famosa estatua de la Sirenita de Hans Christian Andersen, una de las mayores atracciones turísticas de Copenhague, fue objeto de vandalismo, con los colores de la bandera rusa pintados en la roca sobre la que se sienta, informó un periódico el jueves.
El bronce de 1,65 metros (5,4 pies) de altura, atacado con frecuencia, se encuentra en la entrada del puerto de Copenhague.
No se supo cuándo ocurrió el vandalismo. La roca estaba pintada con rayas blancas, azules y rojas. Nadie se ha hecho responsable del hecho.
La estatua fue creada en homenaje al narrador danés Andersen. Durante mucho tiempo ha sido un objetivo popular para los vándalos, que previamente volaron a la sirena de su percha, la decapitaron y la pintaron.
El bronce se basa en la hija sirena de un mítico rey del mar que, según el cuento de Hans Christian Andersen, se enamora de un príncipe y anhela convertirse en humana.
