Un nuevo golpe en materia de infraestructura recibe Buenaventura, esta vez energética, pues la empresa EPSA, Celsia, canceló el proyecto de la segunda línea de energía la cual tenía una inversión de $60 mil millones.
Según las directivas de la empresa, el proyecto se exponía a sobrecostos del 83% que no podía asumir, principalmente por nuevos trámites y consultas previas adicionales que debían realizar.
“El proyecto, aprobado en noviembre de 2010 con un valor de $37.000 millones, en abril de 2016 ascendió́ a $69.537 millones, es decir, aproximadamente, $32.537 millones. más del valor aprobado por la UPME”, argumentó Celsia.
Allí cerca de mil viviendas de invasión nacieron por el trayecto en donde se montaría la segunda linea y además en inmediaciones de la estación Gamboa que es el eje del corredor electrico.
La segunda linea de suministro de energía es indispensable para Buenaventura ante los daños que se han presentado en la red que sale desde las centrales del Alto y Bajo Anchicayá hacia el puerto. Estos daños han provocado apagones de tres días a una semana.
Epsa Celsia ya compró los equipos y están en Palmira, pero según los voceros de la entidad, serán utilizados en otros proyectos del generador electrico.
Tras el anuncio, la empresa hizo el debido reporte ante la Unidad de Planeación Minero Energética para que dé inicio a los trámites requeridos para que dicho proyecto se ejecute aplicando el proceso de selección de convocatoria pública.
