Hace un año atrás agentes federales y del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos ingresaron a una vivienda en un exclusivo sector de La Florida, para realizar un allanamiento que había sido ordenado por un Juez ante la solicitud directa de la oficina de servicio de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos.
En esa ocasión Jenny Ambuila le dijo a las autoridades que Su costoso su estilo de vida era producto del trabajo de su padre Ómar Ambuila y de los negocios establecidos en Colombia por su madre Elba Chará, a parte de la venta de un inmueble en Cali.
Aunque sus respuestas fueron suficientes para alejar por un tiempo a las autoridades, en el rastro de las actividades económicas de los Ambuila, quedó claro que no tenían cómo justificar un Lamborghini de mil millones, bolsos Chanel de 18 millones entre otros lujos.
De vuelta en Colombia los investigadores supieron que la casa vendida en Cali jamás existió y que el pago mensual de la renta donde vivían en Estados Unidos no la cubría ni tres meses de salario de su padre. Por su parte los negocios legales de su madre tampoco daban para sostener el mundo en el que vivían.
Entre los negocios que crearon en Cali está Nelato. El objeto social de su proyecto empresarial era según el documento es “desarrollar y ejecutar actividades de preparación, compra y venta de comestibles y productos alimenticios entre los cuales se encuentra la producción y conversación de helados congelados a base de nitrógeno”.
Nelato funciona desde el 26 de agosto del año 2016, seis meses antes de que Jenny se comprará Lamborghini personalizado, esta marca abrió dos locales en los centros comerciales Unicentro y Chipichape.
Q hubo Cali
