El grupo guerrillero instaló su centro de operaciones en los departamentos deCauca, Valle y Nariño. Se trató de una decisión estratégica de su secretariado. La zona también está copada por las sanguinarias bacrim
Las FARC están planeando "su arremetida militar" desde estos departamentos colombianos, según lo explicó a El País de Colombia el analista León Valencia, director de la ONG Nuevo Arco Iris, que presentó un informe acerca de la realidad del grupo armado.
"Cali es la ciudad más importante para las FARC, debido a que su ubicación e importancia económica les sirve para la logística y consolidación de su movimiento político", detalló Valencia.
Según el experto, las FARC primero intentaron llegar a Bogotá, pero debieron desplazarse a la zona de Cauca, Valle y Nariño, donde operan con varias estructuras del Comando Conjunto Occidente, como los frentes 30 y 6.
En esta zona del país también operan las peligrosas bacrim (como se abrevia a las "bandas criminales"), en especial el gripo denominado Los Rastrojos. Estos grupos actúan de forma similar a los paramilitares, porque poseen una estructura vertical, dominio territorial y vínculos con sectores estatales y las fuerzas públicas. Están catalogadas como las sucesoras de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), cuyos integrantes -de extrema derecha-, se desmovilizaron entre 2003 y 2006, durante el gobierno de Álvaro Uribe, a cambio de beneficios jurídicos.
Durante el primer semestre de este año en el norte de Nariño y en el sur del Cauca, las FARC y Los Rastrojos perpetraron más de 30 atentados.
Según el último informe de la ONG, denominado "La nueva realidad de las FARC" y publicado en su sitio web, "Las FARC tienen una nueva estrategia y táctica militar. El Plan 2010, basado en descentralización, movilidad de pequeños grupos en unidades tácticas de combate y nuevos métodos de guerra, explica la intensificación de sus acciones en algunas zonas del país", explican.
El informe asegura que "las acciones están caracterizadas por los golpes de mano, por la movilidad y por eludir choques prolongados (…) Esta nueva estrategia ha traído consigo el uso masivo de minas antipersonal, la utilización de francotiradores y, sobre todo, desde 2010, un aumento acelerado de hostigamientos".
Para Valencia, "una posible muerte de "Alfonso Cano" (máximo jefe de las FARC) significaría un golpe indiscutible a la nueva estrategia militar del grupo guerrillero".
Infobae
