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El temporal que afecta al Reino Unido obligó a suspender la mayor parte de la jornada. Sólo se disputaron dos partidos. El clásico del domingo entre Manchester y Chelsea, también fue pospuesto
Los únicos dos juegos que se disputaron fueron la victoria del Sunderland ante el Bolton Wanderers por 1 a 0 (gol de Danny Welbeck) y el empate 1 a 1 entre Blackburn Rovers y West Ham United (Ryan Nelsen, Junior Stanislas).
La dirigencia inglesa decidió suspender el resto de los partidos pautados para la jornada del sábado debido a la gran cantidad de nieve acumulada en los estadios y a las complicaciones que el temporal le genera al transporte. Los duelos pospuestos son: Liverpool-Fulham, Wigan-Aston Villa, Birmingham-Newcastle y Arsenal-Stoke City.
El domingo no se jugará ninguno. Tras confirmarse que el clásico entre el Chelsea y el Manchester United no se jugará debido a las condiciones del Stamford Bridge, también se suspendieron Blackpool-Tottenham y West Bromwich-Wolverhampton.
La intensa tormenta de nieve que cayó sobre Londres cubrió los estadios de la capital con tres centímetros de blanco y motivó al Chelsea a consultar con las autoridades locales y la policía para determinar si su estadio debería acoger o no el partido. Estos recomendaron el aplazamiento.
Un total de sesenta partidos de fútbol fueron anulados este sábado en todo el Reino Unido a causa de las nevadas y el hielo, que también causaron importantes alteraciones en el tráfico aéreo y las carreteras de todo el país. Algunos clubes, de hecho, tomaron la decisión de no celebrar su compromiso para velar por la seguridad de sus seguidores, que se verían obligados a circular por vías heladas para asistir al partido.
Por el momento, la Premier League mantiene sin cambios el duelo fijado para el lunes entre el Manchester City y el Everton.
