Redacción BL
Los pobladores de López de Micay, municipio ubicado al noroccidente del Cauca y distante a cuatro horas en lancha de Buenaventura, salieron de nuevo a las calles a protestar.
Desde hace 10 días el personal del único hospital que tiene López de Micay entró en paro. El alcalde Juan Nepomuceno Riascos dijo que solo se atendían emergencias.
Los 73 contratistas, más los 14 empleados de planta, decidieron entrar en cese de actividades desde el pasado primero de marzo.
El párroco de la población, Luis Armando Andrade, dijo que el martes pasado se realizaron dos marchas, una en la mañana y otra en la tarde, en la que participaron cerca de 400 personas, incluidos los trabajadores del Hospital. Ayer, las marchas se repitieron por la calle principal de López de Micay para llamar la atención del Gobierno departamental sobre esta situación.
El Hospital de López de Micay, de nivel I, atiende un promedio diario de 80 pacientes, incluidos los de urgencia.
«Nadie ha venido a enterarse de lo que nos pasa, ni la Defensoría, ni la Superintendencia de Salud, ni la gobernación del Cauca», dijo el médico Edyee Saac Carabalí.
En López de Micay tienen un médico general y dos médicos rurales pero, se necesitan seis como mínimo. Solo hay una enfermera y se requieren cinco más, según Saac.
A los médicos les adeudan el sueldo de enero y febrero y al resto de contratistas no les pagan desde noviembre pasado.
Este Hospital es responsabilidad de la Empresa Social del Estado. Su gerente, Alirio Barrios, dijo que hace un año recibieron la entidad con un déficit de 1.400 millones de pesos y que en el último trimestre no habo casi nada de presupuesto para operar. Y que las dificultades financieras se presentan desde el 2007 por glosas cargadas a la empresa.
Según Barrios, se pondrán al día con los contratistas y con los médicos hasta enero. Ayer se esperaba el giro de los recursos.
Para cualquier queja o para reunirse con los representantes de las Empresa Social del Estado la gente de López de Micay debe desplazarse hasta el municipio de Timbiquí, a dos horas y media en lancha desde la cabecera municipal.
No parece Hospital
López de Micay tiene 24.000 habitantes, en la cabecera municipal solo se concentran 2.500, el resto está en los corregimientos y ninguno de ellos tiene centro de salud, ni siquiera cuentan con promotores de salud.
La población no solo protesta por el paro de la salud, sino por las condiciones en que se encuentra el Hospital, son lamentables.
Según el médico Saac Carabalí, las historias clínicas se mojan por las goteras del techo que se extienden hasta la sala de hospitalizaciones. Las camas están oxidadas y los colchones dan pena, no cuentan con agua potable y carecen de los medicamentos más esenciales.
«Faltan líquidos intravenosos, dextrosa, ampicilina, analgésicos, antidiuréticos y antídotos. Esta zona está llena de culebras y es lo que más necesitamos», dijo Saac Carabalí.
«Es necesario que se conozca cómo se encuentra la salud en López de Micay», dijo el padre Andrade.
