Uno de los flagelos que más ha preocupado a la sociedad en general en el mundo ha sido la violencia contra la mujer, al punto de que se han desarrollado políticas estatales con el objetivo de enfrentar esta problemática.
Colombia es uno de los países que han estado más quedados frente al tratamiento de este problema. Según cifras de la Organización para el Desarrollo Económico (Ocde), el país es el tercero en el mundo con las cifras más altas de las naciones que hacen parte de este ente internacional.
Violence against Women (%)
Türkiye??: 38
Colombia??: 37.4
CR??: 36
US??: 35.6
NZ??: 35
Denmark??: 32
UK??: 29
France??: 26
Germany??: 22
Italy??: 19
Australia??: 16.9
Korea??: 16.5
Japan??: 15.4
Mexico??: 14.1
Spain??: 13
Switzerland??: 9.8
Chile??: 6.7
Canada??: 1.9@OECD pic.twitter.com/4nfPn0LExE— Informal Economy (@EconomyInformal) November 23, 2022
Este balance reveló que, comparado con el cierre del 2022, Colombia bajó un puesto en este listado, sin embargo, mantiene su permanencia como uno de los países con más índice de violencia contra la mujer.
«La violencia contra la mujer (VCM) sigue siendo una crisis mundial. En todo el mundo, más de una de cada tres mujeres ha sufrido violencia física y/o sexual por parte de su pareja íntima o violencia sexual por terceros en su vida«, explicó la Ocde.
Violencia contra la mujer
Su impacto en la economía
La Ocde presentó unos parámetros sobre se hace una evaluación de los efectos que la violencia contra las mujeres en el económico y en el ámbito social. Esta situación, según indica la organización, tiene efectos directos en materia financiera.
(A. Latina, por encima del resto del mundo en desigualdad de ingresos)
Se puede ilustrar un ejemplo en uno de los informes que presentó la Ocde, el cual muestra que, en el caso de Colombia, existen muchos desafíos en temas referentes al empoderamiento social y económico de la población femenina.
Ante esto, desde la Ocde se sugiere hacer avances en la consolidación efectiva y orgánica de políticas de estado que puedan impulsar la superación de barreras para las mujeres colombianas y lograr así una mejor paridad en materia laboral, productiva y competitiva.
«La desigualdad de género domina todos los aspectos de la vida social y económica y afecta a los países sin importar su grado de desarrollo. Es frecuente que las mujeres jóvenes que viven en países miembros de la Ocde tengan ahora más escolaridad que los hombres jóvenes, pero las mujeres siguen teniendo escasa representación en los terrenos lucrativos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas«, explicó la Ocde.
(Colombia saldaría pronto su deuda con el BID, según Minhacienda).
Según cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), las mujeres son el grupo poblacional categorizado por sexo que tiene la tasa de desempleo más alto.
Otras violencias monetarias imperantes son la participación en el mercado laboral. De acuerdo con la Ocde, Colombia podría tener mejores cifras en caso de que existieran estrategias efectivas que ayuden a combatir la violencia contra la mujer, lo cual se podría reflejar un posible crecimiento económico del país.
(PIB de los países del G20 creció 0,9% en el primer trimestre).
«Las barreras al acceso equitativo a oportunidades de empleo, a finanzas y a derechos sobre la tierra en Colombia son un obstáculo significativo para el avance social y económico de las mujeres, y esto tiene impactos posteriores en su capacidad de acceder a oportunidades políticas«, concluyó la Ocde.
PORTAFOLIO
