Redacción BL
Entre el 2012 y el 2022 se destinaron cerca de $6,63 billones de regalías para proyectos de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI), según reporta el Departamento Nacional de Planeación (DNP), Lo llamativo es que muchos de los proyectos en los que se han gastado esas inversiones son poco estratégicos y se llevan una gran cantidad de dinero.
La inversión data desde 2012, luego la creación del Sistema General de Regalías (SGR) en el 2011, con lo que se modificó la distribución de los recursos que las empresas petroleras le pagan al Estado por la explotar yacimientos de un recurso natural no renovable.
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Así, entre el 2012 y el 2018 se destinaron $2,92 billones a proyectos de CTI, mientras que entre 2019 y 2022 se destinaron $3,71 billones para proyectos en este sector. Ese aumento en los últimos tres años se debe a “la implementación de las convocatorias públicas abiertas y competitivas (Ley 1923 de 2018)”.
En cuanto a proyectos en especifico, durante el bienio 2021-2022, en el Órgano Colegiado de Administración y Decisión (Ocad), que es el encargado de evaluar y aprobar los proyectos que serán financiados, se aprobaron 402 proyectos, con valores promedio de $3.452 millones, según el DNP.
Pero, uno de los problemas que expertos mencionan es que “se va mucho dinero en iniciativas poco estratégicas”.
(Ejecución de proyectos con regalías en últimos dos años va en 45,5 %).
Desde el DNP mencionan que los ejemplos más claros de proyectos de bajo impacto “son los montos que oscilan entre los $1.000 y los $5.000 millones invertidos a proyectos que han sido interpretados como ciencia e innovación”, pero en realidad son “visitas escolares a zoológicos”.
El DNP agrega que para poner frente a esos usos con poco impacto en cuanto a ciencia e innovación, tienen dos apuestas.
La primera, realizar convocatorias con mayor alcance, organizadas por misiones y programas que estén alineadas con el Plan Nacional de Desarrollo. A partir de implementar esta estrategia, “esperan dar lugar a proyectos con mayor asignación de recursos, cercanos a los $50.000 millones que fomenten la cooperación, convoquen actores con intereses comunes y que conduzcan a tener una apuesta sólida en el sector de la ciencia, tecnología e innovación”.
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El segundo punto que espera implementar el DNP está en “promover proyectos de orden regional que respondan a las necesidades de cada territorio y que integren todas las iniciativas y actividades propuestas por los Consejos Departamentales”.
Por otra parte, Arturo Luna, ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, afirma que la mejor manera de mejorar la inversión de los recursos es a través del desarrollo de convocatorias y apoyo de proyectos de inversión.
Pero esto, se debería hacer “en tres dimensiones. Una primera, departamental, que esté orientada a cerrar brechas entre los territorios y fortalecer sus capacidades locales en materia de Ciencia, Tecnología e Innovación para poder obtener una sociedad del conocimiento más justa y equitativa”.
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Como segunda dimensión, Luna dice que es necesario trabajar desde lo regional.
“Colombia es un país al cual le cuesta identificar y solucionar de manera conjunta sus problemas, desde el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación queremos promover inversiones dirigidas a atender problemáticas o aprovechar oportunidades comunes entre diferentes departamentos. Esto podría movilizar proyectos con una mayor cantidad de recursos, contar con una mayor cantidad de beneficiarios y evitará realizar inversiones atomizadas que han demostrado no ser efectivas en el campo de CTeI”, dijo.
Como tercer punto, agrega que las situaciones que se han vivido con la pandemia dan muestra de que “es necesario desarrollar investigaciones de interés y beneficio nacional orientadas a generar infraestructura y capacidades para poder obtener autonomía en el desarrollo de nuestros propios fertilizantes”.
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En esa medida, desde esta cartera quieren “apostar por inversiones en Macroproyectos estratégicos nacionales (del orden de los $100.000 a $300.000 millones), que den solución a problemáticas de orden nacional y propendan por aumentar significativamente la productividad de la economía nacional y popular”.
Además, desde el ministerio se espera poner en marcha “el plan bienal de convocatorias para el bienio 2023-2024, con el que se espera movilizar la mayor asignación de recursos en CTeI de los últimos años, correspondiente a $2.9 billones”.
Adicionalmente, DNP y Minciencias están trabajando en que los requisitos para los proyectos sean más flexibles.
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El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación da cuenta de que con los recursos de regalías se han impactado a sectores como: agricultura y desarrollo rural (22%), educación (22%), salud y protección social (15%), ambiente y desarrollo sostenible (12%), comercio, industria y turismo (10%) y el 18% restante en los sectores de tecnología de la información y comunicaciones, cultura, entre otros.
En cuanto a las convocatorias públicas, se han aprobado recursos por $2,7 billones para temas como: emergencia Covid (26%), innovación (15%), investigación y desarrollo (13%), apropiación social del conocimiento (10%), becas del bicentenario (8%), fortalecimiento IES (7%), formación de alto nível (4%) y un 17% en otros temas.
CLAUDIA M. QUINTERO RUEDA
Periodista de Portafolio
