El gobierno ruso ha confirmado los rumores en torno a un plan para crear una enciclopedia digital ‘oficial’, que rivalice con la Wikipedia, a la que Putin calificó hace diez meses de obra «poco fiable». Se destinará a este proyecto un presupuesto de 2.000 millones de rublos (31 millones de euros).
La idea acaparó titulares en Rusia hace unas semanas, después de que el propio Putin se hiciera eco, durante una reunión del Consejo Presidencial de la Lengua Rusa, de este proyecto que una de sus diputadas, Yelena Yampolskaya, llevaba tres años defendiendo.
Ahora, gracias a Sergei Kravets, editor ejecutivo del proyecto, sabemos que los primeros pasos del mismo se empezaron a dar este mismo verano, y que esperan tener listo el nuevo rival de la Wikipedia «durante la primavera o el verano de 2022».
Según las autoridades del país, esto permitirá a «[los rusos] acceder online a información fiable que se actualiza de manera constante y basada en fuentes de conocimiento científicamente verificadas«.
La ‘nueva Wikipedia’ no será nueva ni se parecerá a la Wikipedia
Pero no hay mención alguna a los ideales que promueve la Wikipedia y que le diferencian de la mayoría de sus rivales: copyleft, edición colaborativa, etc.
John Lubbock, coordinador de comunicaciones de la Fundación Wikimedia en el Reino Unido, ha afirmado no tener muy claro cómo el proyecto de Putin podría aportar mejoras al modelo de la Wikipedia en Ruso, la séptima versión lingüística de la misma por número de usuarios (2,6 millones) y de artículos (1,5 millones).
Y es que de hecho, pese a la enorme inversión, esta ‘Wikipedia gubernamental’ vendría a ser tan sólo la versión digitalizada de la Gran Enciclopedia Rusa, disponible sólo en papel y heredera de la Gran Enciclopedia Soviética que la editorial del Estado, la Gosizdat, empezó a publicar durante el gobierno de Stalin. La última edición de la versión rusa se ha ido publicando en volúmenes entre 2004 y 2017.
El proyecto de Putin para Internet va mucho más allá de la Wikipedia
En realidad, el gobierno ruso jamás ha simpatizado con la Wikipedia, a la que ha bloqueado el acceso en numerosas ocasiones desde su lanzamiento en 2001, y cuyos voluntarios rusos no han podido recibir ayuda económica de la Fundación Wikimedia en base a la legislación sobre ‘agentes extranjeros’.
En otras ocasiones, como en 2015, se ha llegado a bloquear el acceso a la Wikipedia desde Rusia recurriendo a que el artículo dedicado al ‘cannabis’ vulneraba la legislación anti-drogas del Estado ruso.
También han existido conflictos entre Wikimedia y Kremlin cuando grupos supuestamente vinculados a este último fueron ‘cazados’ realizado cambios en artículos ‘sensibles’, como los referidos al conflicto ucraniano.
Pero, a la hora de valorar esta iniciativa, debemos hacerlo en el marco de un proyecto más amplio del estado ruso con el fin de aumentar el control que ejerce sobre sus ciudadanos y sobre la tecnología que éstos usan.
La búsqueda de un ‘Internet soberano’ (es decir, aislable de las estructuras globales de la Red). y la reciente prohibición de la venta de dispositivos tecnológicos que carezcan de software ‘made in Russia‘, serían ejemplos de esto.
Vía | NewsWeek & MIT Technology Review