El presidente de Colombia aseguró que las Fuerzas Armadas "saben perfectamente" dónde se oculta el jefe de las FARC. Descartó una negociación con la guerrilla
"Ese bandido cae, como cayó el «Mono Jojoy»", arriesgó Santos. "Las Fuerzas Militares saben perfectamente en qué área está Cano. Vamos a continuar, vamos detrás de él, respirándole en la nuca, como le estamos respirando en este momento", aseguró durante un acto en Villa de Leyva, Boyacá.
De esa forma, salió al cruce de las versiones que indicaban que el máximo líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia habría aprovechado la desmilitarización de una zona selvática, durante la frustrada liberación de dos rehenes de la guerrilla, para cambiar de escondite. El propio Santos había alimentado esa hipótesis al decir que era "posible" que eso hubiera ocurrido.
Rechazó la improbable teoría de que los helicópteros de la Cruz Roja, con la ex senadora Piedad Córdoba a bordo, hayan sido utilizados para sacar a Cano del Tolima y trasladarlo a otra región. "No hay tal que los helicópteros se utilizaron para sacarlo, pues sabemos exactamente por dónde está. Ni bobos que fuéramos que vamos a permitir hacer operaciones en un área donde esté él y vayamos a facilitar que se nos escape".
Se ilusiona con "ser registrado ante la historia como el presidente que logró finalmente la paz en este país", aunque apuntó que "sé que ahí hay que caminar con pies de plomo, con inteligencia". En ese sentido, avisó que por ahora "la puerta está cerrada" para un eventual diálogo con las FARC y que sólo se abrirá "bajo condiciones".
