El régimen socialista de Venezuela además de no poder suministrar a su población recursos básicos como el papel higiénico, ya no puede sostener tampoco a los periódicos impresos porque no tiene papel en que publicarlos. Según publica el diario venezolano «El Tiempo», la publicación «Antorcha», de El Tigre anunció la suspensión temporal de sus servicios debido a la escasez de planchas, papel, películas y otros materiales indispensables para que pueda salir a la luz. Su presidente, a través de el editorial publicó estar «devorados por la misma inflación, devaluación y crisis económica» que les afecta.
La publicación, que ha cumplido este año 59 años desde que se fundara, ha sufrido durante 2013 muchas dificultades para poder seguir informando a los venezolanos. «Hoy les decimos hasta luego, rogando que la normalidad se restablezca pronto para que nuestros lectores, anunciantes y articulistas tengan de nuevo en sus manos "Antorcha"», rezaba el editorial.
Pero «Antorcha» solo es una más de las publicaciones que han dejado de ver la luz en estos últimos meses. Antes lo hicieron también «Caribe» y «La Hora», en el estado de Nueva Esparta. El «Sol», de Maturín también corrió la misma suerte y tras 40 años sin faltar a su cita con los lectores se despedía de ellos «momentáneamente ante la falta de material».
La voz de alarma saltaba este sábado 31 cuando en un reportaje publicado por Globovisión, diferentes conocedores del panorama mediático expusieron las dificultades que atraviesan para poder adquirir papel con que imprimir los ejemplares. En agosto del pasado año la importación del papel era prioritaria, al igual que los alimentos y medicamentos, pero un cambio en la jerarquía hizo que fuera relegada a un segundo puesto en cuanto a prioridades de importación. Este cambio ha influido de manera directa en el problema que ahora atraviesa la prensa en el país, pues ahora sí que se necesita un permiso previo para importar, situación que no se daba antes.
Este Certificado de No Producción Nacional (CNP) lo concede el Ministerio de Industrias Ligeras, ligado al Ministerio de Comercio y es el que autoriza la compra al exterior porque no se fabrica en el país. Un retraso en la entrega de estos podría haber provocado los problemas de falta de papel.
