Se trata del mediocampista argentino Hugo Barrientos, actual futbolista de All Boys, quien denunció: "Amenazaron de muerte a mis hijos por un partido de fútbol"
Las consecuencias de la jugada en la que el talentoso colombiano Giovanni Moreno sufrió la rotura de ligamentos cruzados tomó dimensiones impensadas. Además de la grave lesión, ahora el futbolista acusado de lastimarlo intencionalmente tuvo que salir a proteger a sus hijos.
Barrientos, apuntado por muchos como uno de los jugadores más violentos del fútbol argentino, se defendió: "A mí me han roto el hombro en la cancha y no ha pasado nada. Lamentablemente, estamos en un equipo chico y nos caen palos a todos, más a mí, que estoy en el ojo de la tormenta".
Sobre lo sucedido en el terreno de juego, el jugador respondió: "Me hago cargo de que le dije que le iba a pegar. Pero después del partido me hicieron miles de preguntas y hablé de la mejor manera del jugador porque las cosas quedan dentro del campo de juego".
Por último, reiteró: “yo no fui a lastimar al jugador, fuimos los dos a trabar la pelota", aseguró el volante ante la prensa, que lo responsabiliza por una acción violenta del partido donde ambos se cruzaron fuertemente en la mitad del campo.
Los antecedentes del jugador de All Boys no son los mejores, ya que en el último partido del 2010 provocó un gran corte sobre el rostro de un futbolista de Banfield, Rubén Ramirez, quien en aquella ocasión lo acusó de mala persona. Aunque nada justifica la amenaza sobre sus hijos, un hecho condenable desde todos los aspectos.
