Debemos terminar con las excusas y empezar a hacer algo por nosotras, abrirnos a caminos nuevos, para aprender y valorarnos, no debemos desaprovechar las miles de oportunidades que tenemos a nuestro alcance como abrir un negocio o emprender algo que siempre nos gustó.
Podemos estudiar, practicar yoga, escribir, realizar algún curso que siempre quisimos y nunca contamos con tiempo suficiente, en otras palabras capacitarnos para terminar con la rutina diaria y empezar a ser nosotras mismas y descubrir que podemos, que contamos con la posibilidad de cambiar, de realizar un emprendimiento nuevo y ganar nuestro propio dinero, no solo nos brindará el apoyo que necesitamos sino que nos hará crecer y enriquecer espiritualmente.