A Independiente de Argentina le bastó mantener su valla cerrada para llegar a una semifinal internacional después de 15 años, al empatar sin goles el jueves ante Deportes Tolima de Colombia por los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
El Rojo, único sobreviviente argentino en la competencia, se medirá en la próxima instancia ante el campeón defensor Liga de Quito.
El conjunto de Antonio Mohamed sacó boleto a la siguiente ronda gracias al 2-2 en el choque de ida en Ibagué, que obligaba a los colombianos a ganar. Al menos, Tolima necesitaba empatar por el mismo marcador para forzar los penales en el estadio Juan Domingo Perón de Racing Club, donde Independiente hizo de local por tener su cancha suspendida.
El duelo estuvo lejos de ser un trámite tranquilo para los Diablos Rojos.
Tolima, con el antecedente de llegar huérfano de goles en condición de visitante, avisó a los diez minutos a través de su arma más letal: la pegada de Rodrigo Marangoni, quien ejecutó un tiro libre que salvó el arquero Hilario Navarro.
Independiente respondió a los 18 en un tiro de esquina que conectó el defensor Leonel Galeano, pero el travesaño se interpuso.
A los 34 minutos el árbitro paraguayo Carlos Amarilla, cuya designación no gustó al Tolima, le anuló un gol a Yesid Martínez, al parecer por una presunta mano cuando le ganó en el salto a Navarro.
Antes del descanso, el arquero visitante Anthony Silva falló en la salida y le dejó servido el gol a Patricio Rodríguez, que no supo aprovechar la gentileza.
El segundo tiempo transcurrió sin llegadas de riesgo a causa de las inseguridades de Independiente y la falta de osadía del Tolima, aunque a poco del final Diego Chará incursionó en área local y de cara al arco erró su tiro.
La última vez que Independiente alcanzó las semifinales fue por la Supercopa de 1995, torneo que luego ganaría.
