La Semana Santa, una de las festividades más importantes del calendario litúrgico cristiano, estará marcada por las precipitaciones en varios departamentos de Colombia, según los pronósticos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam). Del 18 al 22 de marzo, se esperan lluvias de ligeras a moderadas en gran parte del país, con mayor intensidad en las regiones Andina y Pacífica.
Daniel Useche Samudio, jefe (e) de la Oficina del Servicio de Pronósticos y Alertas (OSPA) del Ideam, explicó que se ha observado un aumento significativo de la nubosidad sobre el territorio colombiano, lo que favorecerá la presencia de lluvias importantes durante la Semana Santa.
«A lo largo de las últimas horas, hemos observado un ingreso considerable de nubosidad hacia el territorio colombiano. Esta situación contribuirá al desarrollo de lluvias importantes durante esta semana», señaló Useche.
Los departamentos que se verán afectados por estas lluvias moderadas a fuertes durante la Semana Santa incluyen La Guajira, Cesar, Magdalena, Bolívar, Córdoba, Guaviare, Caquetá, Vaupés, Atlántico, Arauca, Casanare y Vichada.
A pesar de que Colombia se encuentra actualmente en medio del fenómeno de El Niño, caracterizado por altas temperaturas, algunas regiones del país experimentarán lluvias durante este período. La directora del Ideam, Ghisliane Echeverry Prieto, explicó que el fenómeno de El Niño no excluye la posibilidad de que ocurran otras dinámicas atmosféricas, como lluvias transitorias.
«Especialmente durante una temporada seca, las lluvias pueden ser causadas por diversos factores, como la entrada de humedad desde el sur, un frente frío desde el norte o las dinámicas atmosféricas generales», afirmó Echeverry. «Incluso pueden producirse tormentas eléctricas en estas condiciones».
A pesar de la presencia de lluvias durante la Semana Santa, se espera que el fenómeno de El Niño se debilite en los próximos meses y dé paso a una fase neutral, seguida por la fase fría del fenómeno de La Niña durante el segundo semestre de 2024. Esta fase se caracteriza por un aumento de las precipitaciones y una disminución de las temperaturas en varias regiones del país.
