Redacción BL
El narcotráfico ha sido una de los males que más ha impactado al país. Además, los riesgos de esta actividad se podrían intensificar en el agro colombiano debido a la contaminación de los contenedores con droga que salen a los diferentes destinos internacionales.
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Este es un hecho que afecta al sector, e incluso a la marca país. Cabe recordar que en enero de este año en un buque cuyo destino era presuntamente Beirut, capital libanesa, fueron incautados un total de 4.500 kilos de cocaína que estaban ocultos en el barco procedente de Colombia y que transportaba al menos unas 1.750 vacas.
Al respecto el presidente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedegán), José Félix Lafourie, explicó en su momento que “los ganaderos nada tienen que ver, pues venden sus animales (en finca) a un exportador que los entrega a bordo del buque (FOB), y desde ese momento, los riesgos y responsabilidades se trasladan al comprador”.
Portafolio consultó a los diferentes gremios agricultores que exportan gran parte de sus productos para saber qué medidas están tomando en esta materia y los riegos que genera.
De acuerdo con Javier Diaz, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores (Analdex), no se puede negar que Colombia ha sufrido de ese difícil flagelo, lo que ha obligado a las empresas exportadoras a fortalecer e implementar altos estándares de seguridad.
Teniendo en cuenta que las organizaciones criminales en algunas ocasiones se aprovechan de la cadena logística internacional para contaminar las cargas con sustancias ilícitas.
(Vea: Así es el plan de protección cambiaria para medianos exportadores).
Según el directivo, se deben tener estándares de seguridad y, en la medida que sea posible, adoptar el programa del Operador Económico Autorizado (OEA).
“Las acciones que estamos haciendo como gremio es promover la figura del OEA desde el 2016. Para el 2019 teníamos alrededor de 30 compañías y hoy estamos llegando a 700, de las cuales 200 son exportadores”, explicó Díaz.
A las medidas se suma el sector bananero que invierte en el monitoreo de la logística con GPS y centros de control en los contenedores, camiones y fincas, además de contar con circuitos de televisión para hacer la debida vigilancia.
José Francisco Zúñiga, presidente ejecutivo de la Asociación de Bananeros del Magdalena y la Guajira, (Asbama), le explicó a este medio que se calcula que al menos unos US$1,5 millones se están destinando a este proceso de seguridad.
“Tenemos una gran amenaza a la operación bananera con grupos al margen de la ley permeando la cadena de logística de transporte, contaminando con sustancias ilícitas el proceso. Esto nos pone en riesgo no solo como sector, sino en los mercados internacionales provocando la cancelación de contratos”, señaló Zúñiga.
(Vea: Menos del 3% de exportadores tiene nexos con África).
A su turno, Gustavo Gómez, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Café de Colombia (Asoexport), manifestó que en el caso del grano, este se exporta bajo una negociación FBO, con una modalidad FCL (Full Container Load) lo que implica que la custodia del café exportado llega hasta puerto, seguido de la línea naviera y posteriormente del cliente.
Añadió que por cuestiones de análisis de control de calidad, los sacos se descargan en el puerto y se chuzan con una sonda para tomar la muestra para el control de calidad, después se almacena en las bodegas de café y se conteneriza.
“La mayor parte de las empresas están certificadas BASC u OEA, tienen una trazabilidad desde la trilladora hasta el cliente final. En el caso del café, más que los riesgos de que se dañen los contratos, lo que sí pasa es que estamos expuestos a temas de incumplimientos a los clientes en el sentido de que, sobre todo, a los pequeños exportadores se les hace inspección física y esto puede generar que la carga tenga retrasos”, dijo Gómez.
(Vea: Por combustibles y agro se contraen las exportaciones del país).
Por otra parte, explicó que “exportar en Colombia es una tarea muy difícil desde el punto de vista de contaminación de carga, pero entendemos que las autoridades lo hacen por mantener el control, evitar y blindar el café de este tipo de situaciones”.
Ahora bien, otro de los grandes exportadores del agro colombiano, son las de las flores, las cuales se consolidan como el segundo producto con más comercio internacional. Frente a las medidas y hechos que podrían afectar al gremio floricultor, Augusto Solano, presidente de la Asociación Colombiana de Exportadores de Flores (Asocolflores), le dijo a Portafolio que más del 95% de la producción de este producto se comercializa en el exterior.
“El creciente tráfico de drogas y de producción de coca genera un alto riesgo de contaminación de embarques y eso obliga las empresas a hacer altas inversiones para prevenir que sus exportaciones se contaminen y que en un momento dado se lleguen hasta perder los mercados”, afirmó.
Según el dirigente gremial, la prevención inicia desde los cultivos con circuitos de cámaras, al igual que en el transporte al aeropuerto ejerciendo control con GPS. Una vez llegan al aeropuerto se pasan las cajas por rayos X y en algunos casos la Policía Antinarcóticos hace uso de caninos.
Participación en el comercio internacional
Según datos del Dane, Colombia exportó en total US$57.115 millones en el 2022. Cabe resaltar la participación de los productos, por ejemplo el café comercializó en 2022 un total de US$3.177 millones, participando con el 5,6% de las exportaciones totales. A su turno, las flores se vendieron por US$2.052 millones y su proporción fue de 3,6%.
Bananos facturó US$968,6 millones, contado con una participación de 1,6%, Mientras que el ganado tuvo unos US$523,6 millones y una proporción del 0,9%.
Es decir que el comercio internacional de estos productos representa casi el 12% de las exportaciones totales de Colombia en 2022.
DIANA K. RODRÍGUEZ T.
Periodista Portafolio
