Para nadie es un secreto que la pandemia originada por el Covid-19 ha generado efectos sobre nuestra sociedad, tanto desde el punto de vista social, político y, especialmente económico. Dichos efectos nos han transformado como personas y nos han llevado a ver las cosas desde una perspectiva muy distinta a la que solíamos tener.
En el ámbito económico han sido varios los frentes que se han visto perjudicados por las medidas necesarias para contener el contagio de la enfermedad en nuestra sociedad. El ritmo de actividad económica se ha desacelerado de una manera dramática, a tal punto que muchos expertos vaticinan esta, como la peor crisis económica de la última mitad de siglo en Colombia.
Sin embargo, las medidas adoptadas por las autoridades gubernamentales, tanto en el ámbito local como nacional, han estado rodeadas por una disyuntiva nunca antes vista en nuestra historia reciente: por un lado, se encuentran las medidas de aislamiento social encaminadas a evitar el contagio y propagación de la enfermedad dentro de la población. Esto ha traído consigo el cierre de gran parte de la actividad económica, lo que a su vez genera una fuerte desaceleración del ritmo de producción, ya afectado desde antes de la pandemia. Por otra parte, poco después del comienzo del confinamiento obligatorio, el gobierno nacional ha comenzado a permitir la apertura gradual y condicionada de algunos renglones del sector industrial y comercial, con el fin de contrarrestar el impacto económico negativo. Sin embargo, en la medida que la economía se va reactivando, el distanciamiento social se reduce, lo cual trae consigo el riesgo de contagio que puede llevar a nuestra sociedad a una situación altamente riesgosa en términos de salud pública.
Desde el punto de vista político, dicha disyuntiva también define el rumbo de acción a tomar por parte del gobierno. La teoría económica al analizar el papel del gobierno en la economía plantea que los gobernantes toman decisiones basados en uno de dos principios básicos: por una parte, su orientación ideológica, según la cual, puede optar por tomar decisiones que beneficien en mayor medida a ciertos sectores de la población. Por ejemplo, puede optar por un mayor apoyo a la actividad productiva, mediante exenciones tributarias o reformas de tipo laboral que permitan una mayor facilidad en la contratación de mano de obra vía reducción de costos. O bien, puede ocuparse de aquellos sectores vulnerables de la población mediante políticas de corte social, tales como subsidios a población en condición de pobreza que permitan una mejor redistribución del ingreso.
Por otra parte, se encuentran dirigentes que orientan sus políticas con fines electorales, instrumentando medidas que les permitan garantizar su permanencia en el poder. De acuerdo con esta óptica, los gobiernos promueven la expansión del ciclo económico en los períodos previos a las elecciones a través de medidas de corte fiscal, principalmente. Una vez ha logrado sus fines electorales, aplica medidas contractivas que le permitan contrarrestar los costos que la expansión generó.
Desde sus comienzos (inclusive en campaña), el actual gobierno ha hecho evidente la orientación de sus políticas desde el punto de vista ideológico. Medidas tales como el alivio tributario al sector industrial delimitan sus preferencias y ponen en evidencia su motivación principal, sin suponer esto un menosprecio a los demás sectores de la economía. Así mismo, propuestas como reformas tributarias encaminadas a elevar el recaudo vía impuesto a la renta o gravar con IVA bienes de la canasta familiar evidencian cierta tendencia por focalizar sus esfuerzos en tributos que impactan el bolsillo de los hogares. Es evidente el esfuerzo de los gobiernos, tanto nacional como locales, por intentar mitigar el impacto que el Covid – 19 ha generado en términos de pérdida de vidas y propagación del contagio. Sin embargo, en los últimos meses también se ha evidenciado un marcado interés por evitar que el confinamiento obligatorio termine por ahondar aún más la crisis en materia de crecimiento económico e impacto social, mediante la adopción de medidas tales como la reactivación gradual de determinadas actividades económicas.
Las medidas adoptadas por el actual gobierno representan un costo fiscal elevado que no puede financiarse exclusivamente con endeudamiento, lo cual muestra la necesidad de realizar reformas encaminadas a incrementar los ingresos fiscales. El punto central del debate radica en establecer si las medidas que se adopten dentro de dicha reforma obedecerán más a los intereses ideológicos del gobierno actual, o más bien se encaminen a garantizar su permanencia en el poder, no del presidente, sino del partido que representa. Dependiendo de estas medidas se podrá establecer quienes recibirán el mayor impacto, entre sector productivo o los hogares, de esta reforma inevitable y también el costo político que, en materia electoral, dichas medidas representen.
John Jairo Gómez Ríos
Profesor – Facultad de Economía – Bogotá – Universidad Santo Tomás
Referencias
Colombia entra en Confinamiento Preventivo Obligatorio (2020). Alcaldía Mayor de Bogotá. https://participacionbogota.gov.co/colombia-entra-en-confinamiento-preventivo-obligatorio. Consultado el 02/07/2020
Desempleo en Colombia siguió subiendo en mayo (2020). Portafolio.com. https://www.portafolio.co/economia/noticias-hoy-desempleo-en-colombia-mayo-de-2020-coronavirus-542213. Consultado el 02/07/2020
Indicadores de Cuentas Nacionales (2020). Departamento administrativo Nacional de Estadística – DANE. https://www.dane.gov.co/index.php/estadisticas-por-tema/cuentas-nacionales/cuentas-nacionales-trimestrales. Consultado el 02/07/2020
Indicadores de empleo y desempleo (2020). Departamento administrativo Nacional de Estadística – DANE. https://www.dane.gov.co/index.php/estadisticas-por-tema/mercado-laboral/empleo-y-desempleo. Consultado el 02/07/2020.
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