Las flores son el segundo producto agrícola de exportación de Colombia, después del café. En esta ocasión Augusto Solano, presidente de Asocolflores, en entrevista con Portafolio habló sobre el balance del sector, los 50 años que cumplieron y el negocio del comercio internacional en vísperas de San Valentín.
(Así ‘florecerán’ las exportaciones colombianas en San Valentín).
¿Cómo les fue en exportaciones?
Este es un sector muy dinámico que responde a muchas de las circunstancias que ocurren en el mundo. La floricultura ha venido creciendo entre un 3% y 5%. Nos afectó la pandemia porque las exportaciones bajaron un 5%. Pero los dos últimos años hemos tenido un crecimiento cercano al 20%. Por esta razón, el año pasado cerramos con unas exportaciones de US$2.052 millones.
¿Cuál fue volumen de exportación en 2022?
El volumen cerró en 320.000 toneladas. Frente a las proyecciones es muy difícil saber, pero considero que si logramos lo mismo en 2023 nos damos por bien servidos, porque la situación del mundo de inflación y recesión es un reto para un producto de estos que no es de primera necesidad y que es del ingreso disponible.
(¿Qué tienen que ver las flores con la celebración de San Valentín?).
Sin embargo, en algunos mercados como en Europa las flores son algo que compran con su mercado, porque lo necesitan en sus casas. Ojalá fuera así en otras partes. Pero tenemos incertidumbre para poder lograr eso.
¿Cuáles son los principales destinos?
El principal mercado es Estados Unidos, con un peso del 80% y el 20% restante va a 100 países. Entre esos se destacan Japón, Canadá, Corea del Sur y Reino Unido.
¿Y en especies, qué exportan?
Colombia tiene una característica y es su variedad. Tenemos 40 especies, 1.200 variedades y las principales son rosa, clavel, crisantemo, astromelia y últimamente hortensia.
¿Qué pasa con los costos logísticos?
Del valor de una flor puesta en el lugar de destino, aproximadamente entre el 30% y el 40% es transporte.
Usted pertenece a varias juntas internacionales, ¿cómo ven el mercado colombiano?
Nuestro país es un jugador y proveedor de flores sumamente importante, muy reconocido y muy respetado, no solo por la calidad de las flores, sino por la seriedad de los floricultores.
Y realmente, esa es la única manera de mantener los mercados, porque si los compradores reciben productos de buena calidad y no lo hacen a tiempo, no vuelven a comprar.
Rusia es uno de los mercado a los que ingresan las flores, ¿cómo está la situación?
A Rusia solo exportábamos el 3% de lo nuestro, si cayó pero no tuvo un impacto muy grande, como el que sí tuvo Ecuador que exportaba el 30%, entonces esas flores ha tocado reubicarlas en otros mercados.
Colombia tiene una característica y es su variedad. Posee 40 especies, 1.200 variedades y las principales son rosa, clavel
y crisantemo.
Sergio Acero Yate / El Tiempo
¿Y qué expectativas tienen de San Valentín?
Esperamos que se comporte como siempre, exportando muchos más que en el año, junto con el día de la madre.
(Así le apunta el sector agrícola a una mayor sostenibilidad).
¿Los afecta o beneficia la devaluación?
Nos ha servido para compensar el incremento en costos de los fertilizantes, algunos productos importados y el costo de la mano de obra.
¿Y la inflación?
Nos impacta en los salarios, con el incremento del salario mínimo porque el 50% de los costos de operación son manos de obra. El empaque ha subido mucho y el transporte.
¿Cómo va el empleo en el sector?
Este es un sector que da empleo formal con aportes de pensión, de salud y las empresas en muchas ocasiones van más allá y dan ayudas en educación y vivienda.
Creemos que en un país donde la mitad de los trabajadores son informales y el 80% en el campo lo son, el sector de la floricultura con solo 10.000 hectáreas ya genera 200.000 empleos entre directos e indirectos. No se trata solo de las divisas.
DIANA K. RODRÍGUEZ T.
