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Cuatro custodios fueron asesinados en el municipio de Tonaya, en el estado mexicano de Jalisco, en tanto, en el estado de Guerrero fue muerto el director regional del Centro Estatal de Alertamiento de la Secretaría de Seguridad Pública
Los custodios del Ceinjure fueron asesinados cuando realizaban ayer el traslado de dos detenidos y fueron emboscados por varios individuos a bordo de por lo menos siete vehículos, informó la policía local, según reportó la agencia de noticias ANSA.
La policía estatal confirmó que los custodios fueron emboscados cuando regresaban de Autlán de Navarro, después de haber dejado a los dos detenidos que trasladaban de Ciudad Guzmán.
Por otra parte, las autoridades mexicanas informaron hoy que fue asesinado el director regional del CEA en Guerrero, Gregorio Sánchez.
Según la información, el jefe policial fue encontrado muerto el viernes en el interior de un vehículo en Ciudad Altamirano, luego de dos días de estar desaparecido, y su cuerpo tenía al menos un impacto de bala.
En tanto, fuentes políticas desmintieron hoy la versión sobre la liberación del ex candidato presidencial mexicano Diego Fernández de Ceballos, del Partido Acción Nacional (PAN), secuestrado desde hace más de seis meses.
Versiones periodísticas contradictorias generaron hoy confusión en México sobre la supuesta liberación de Fernández de Ceballos, hasta que el coordinador de la bancada del PAN en el Senado, Gustavo Madero aseguró que "no hay nada" en cuanto a la libertad del ex candidato.
Fernández de Cevallos, de 69 años, candidato del PAN a la Presidencia en las elecciones de 1994, fue secuestrado en mayo, hecho que se atribuyó en un principio al Ejército Popular Revolucionario (EPR), que opera en los estados de Guerrero, Oaxaca y Chiapas, versión desmentida por el grupo en junio en un comunicado.
En octubre, la prensa mexicana informó que la familia de Cevallos había pagado un rescate de 20 millones de dólares y que sus captores acordaron devolverlo a comienzos de noviembre.
La versión nunca fue confirmada o desmentida por la familia, que desde el 15 de mayo solicitó a las autoridades suspender las pesquisas para facilitar la negociación con los secuestradores.
En el último mensaje público, del 13 de septiembre, los secuestradores afirmaron que la familia de Fernández "lo abandonó" y que a "sus propios amigos no les importó su suerte".
Fuente: Télam
