Redacción BLCon sus piernas y brazos hinchados, Alirio Hurtado por fin pisó tierra en el muelle de Guardacostas en Buenaventura. Allí lo esperaba su familia después de 48 horas de angustiosa espera, desde que desapareció en el naufragio de la motonave que tripulaba el pasado 11 de enero.
En una acción heróica, Alirio amarró con una cuerda a los 34 pasajeros de la embarcación que naufragó el pasado miércoles, y nadó hacia la orilla para buscar ayuda, pero perdió su rumbo y fue a parar a 10 millas de la costa del municipio de Pizarro, Chocó, donde fue hallado por algunos pobladores del lugar.
«Uno a veces dice que porqué la gente tira las basuras, pero por eso fue que me salvé, me sostuve con la basura que había en el mar», contó Alirio al ser rescatado.
A pesar de estar bajo el intenso sol de la zona, el experimentado marinero logró sobrevivir tomando agua de botellas que encontraba entre las basuras.
La búsqueda
Según el comandante de Guardacostas del Pacífico, capitán Pedro Prada, «la búsqueda se realizó con embarcaciones y el jueves se contó con apoyo aéreo».
Los integrantes de Guardacostas, Infantería de Marina, las lanchas que transitan periódicamente por el lugar del siniestro, y los moradores de la zona, activaron la búsqueda de Alirio.
«Los muchachos de Bahía Solano que me conocían me estaban buscando también. Yo les agradezco mucho a todos», señaló el marinero.
Aunque las esperanzas se iban agotando, las cadenas de oración y el deseo de hallarlo con vida fue más fuerte que las olas del mar y el clima, que amenazaba con agotar las pocas fuerzas del náufrago.
Fuente: El Pais
